Noticias de Yucatán
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La venta es una de las profesiones más antiguas del mundo. Hoy en día, nos encontramos con cambios en los mercados y nuevas formas de entender el mundo digitalizado caracterizado por los vertiginosos cambios y la necesidad de adaptación a los nuevos mercados y demandas en los consumidores.
Se habla mucho de creatividad, análisis de datos para mejorar la toma de decisiones, trabajar la inteligencia emocional, enfocarnos a los aspectos emocionales con nuestros clientes, etc.
Sin embargo, en ocasiones, aparece el miedo, el bloqueo y ello nos lleva a no avanzar para poder alcanzar nuestros objetivos. El vendedor se le supone ese “Superman” capaz de hacer frente a todos los elementos que tenga en el camino y, en parte, esto es cierto, de hecho, durante siglos el ser humano a comerciado e intercambiado mercancías de una forma más o menos parecida a de hoy en día.
La necesidad de vender de intercambiar productos ha existido, existe y existirá, lo que ha cambiado es la forma de entender esos intercambios, por ello, esta figura del interlocutor para unir las demandas del cliente con las ofertas del fabricante o proveedor seguirán estando presentes en el proceso.
En este escenario es donde se da cita unos de los actores principales, el vendedor o comercial, esta es su realidad actual, su situación ya sea consciente o inconsciente, llega a un punto en la que, algunos vendedores se bloquean, en Coaching hablamos del “saboteador“, de esa voz interior que nos dice expresiones como:
* No puede conseguirlo, mis objetivos son inalcanzables.
* Tengo el peor territorio para alcanzar las metas de este año.
* Mi jefe me ha planteado las cuotas más complicadas de todos mis compañeros.
* Es que con estos medios no podré llegar al 100% de mis objetivos.
* Los clientes no compran porque la crisis les está afectando mucho y ellos casi no venden.
* La competencia lleva mejores ofertas que yo y no puedo competir en precio.
Efectivamente, estos son algunos de los tópicos cuando una persona tiene miedo a la venta y a enfrentarse a una situación muy personal en la que los miedos aparecen y es incapaz de avanzar.
¿Qué podemos hacer en estos casos?
Si nos fijamos en la foto de arriba, la huida es la peor de las evasiones de los problemas. Lo primero, es afrontar la situación y valorar cuál es el momento en el que nos encontramos para, a continuación, actuar y revertir esa situación. Aquí te dejo 3 tips para trabajar en ese momento:
1. El autoconocimiento es la clave de todo este proceso de mejora en tus creencias para abordar tu crecimiento. Solamente tú eres capaz de sacar la mejor versión de ti mismo. Identifica cuáles son tus fortalezas y aquello que te hace único y trabaja tus puntos débiles para que no te supongan obstáculos en tu camino.
Trabajar desde el autoconocimiento te va a ayudar a mejorar tu autoestima lo cual provocará en ti una mejora en tu motivación y, todas esas barreras las verás desde otra perspectiva
2. Identifica tus creencias limitantes. Suponen frenos que no te ayudan a avanzar y a demostrar todas las fortalezas que has identificado anteriormente. Durante mucho tiempo has convivido con ellas, pero, ha llegado el momento de cambiarlas por otras nuevas que te sirven para tu nueva forma de ver la actual realidad.
Cambia tu diálogo interno, utiliza otro lenguaje, haz el ejercicio de cambiar los saboteadores y pasarlos a un lenguaje positivo. Conviértelos en la palanca del cambio. Por ejemplo:
“Voy a alcanzar mis objetivos y llegar a los incentivos del año 2016” Te recomiendo estas herramientas para sacar el potencial que llevas dentro: SER- HACER-TENER
3. Gestiona tu miedo. Muy bien, pero, qué quiere decir eso. Pues bien, el miedo es una de las emociones básicas, tiene un valor de protección, pero, en algunas ocasiones, como he comentado, nos bloquea. Si seguimos los pasos anteriores podemos mejorar personalmente.
Identificar cuando aparece esta emoción es básico para “tratar con ella”, saber de qué nos quiere proteger y “entenderla”. Es un ejercicio de diálogo interior en el cual ayudamos a nuestra emoción a una mejor gestión para conseguir superarnos y que no nos paralice.
Como decía Woody Allen: “El miedo es mi compañero más fiel, jamás me ha engañado para irse con otro”.
El resultado de este trabajo puede suponer mejores resultados, evidentemente, no son los únicos dado que la venta y la gestión comercial suponen un proceso cada día más complejo en el que intervienen multitud de factores, sin embargo, hay algunos elementos en los que podemos actuar nosotros mismos para producir algunos cambios en los demás e influir de manera positiva.
La venta es una de las profesiones más antiguas del mundo. Hoy en día, nos encontramos con cambios en los mercados y nuevas formas de entender el mundo digitalizado caracterizado por los vertiginosos cambios y la necesidad de adaptación a los nuevos mercados y demandas en los consumidores.
Se habla mucho de creatividad, análisis de datos para mejorar la toma de decisiones, trabajar la inteligencia emocional, enfocarnos a los aspectos emocionales con nuestros clientes, etc.
Sin embargo, en ocasiones, aparece el miedo, el bloqueo y ello nos lleva a no avanzar para poder alcanzar nuestros objetivos. El vendedor se le supone ese “Superman” capaz de hacer frente a todos los elementos que tenga en el camino y, en parte, esto es cierto, de hecho, durante siglos el ser humano a comerciado e intercambiado mercancías de una forma más o menos parecida a de hoy en día.
La necesidad de vender de intercambiar productos ha existido, existe y existirá, lo que ha cambiado es la forma de entender esos intercambios, por ello, esta figura del interlocutor para unir las demandas del cliente con las ofertas del fabricante o proveedor seguirán estando presentes en el proceso.
En este escenario es donde se da cita unos de los actores principales, el vendedor o comercial, esta es su realidad actual, su situación ya sea consciente o inconsciente, llega a un punto en la que, algunos vendedores se bloquean, en Coaching hablamos del “saboteador“, de esa voz interior que nos dice expresiones como:
* No puede conseguirlo, mis objetivos son inalcanzables.
* Tengo el peor territorio para alcanzar las metas de este año.
* Mi jefe me ha planteado las cuotas más complicadas de todos mis compañeros.
* Es que con estos medios no podré llegar al 100% de mis objetivos.
* Los clientes no compran porque la crisis les está afectando mucho y ellos casi no venden.
* La competencia lleva mejores ofertas que yo y no puedo competir en precio.
Efectivamente, estos son algunos de los tópicos cuando una persona tiene miedo a la venta y a enfrentarse a una situación muy personal en la que los miedos aparecen y es incapaz de avanzar.
¿Qué podemos hacer en estos casos?
Si nos fijamos en la foto de arriba, la huida es la peor de las evasiones de los problemas. Lo primero, es afrontar la situación y valorar cuál es el momento en el que nos encontramos para, a continuación, actuar y revertir esa situación. Aquí te dejo 3 tips para trabajar en ese momento:
1. El autoconocimiento es la clave de todo este proceso de mejora en tus creencias para abordar tu crecimiento. Solamente tú eres capaz de sacar la mejor versión de ti mismo. Identifica cuáles son tus fortalezas y aquello que te hace único y trabaja tus puntos débiles para que no te supongan obstáculos en tu camino.
Trabajar desde el autoconocimiento te va a ayudar a mejorar tu autoestima lo cual provocará en ti una mejora en tu motivación y, todas esas barreras las verás desde otra perspectiva
2. Identifica tus creencias limitantes. Suponen frenos que no te ayudan a avanzar y a demostrar todas las fortalezas que has identificado anteriormente. Durante mucho tiempo has convivido con ellas, pero, ha llegado el momento de cambiarlas por otras nuevas que te sirven para tu nueva forma de ver la actual realidad.
Cambia tu diálogo interno, utiliza otro lenguaje, haz el ejercicio de cambiar los saboteadores y pasarlos a un lenguaje positivo. Conviértelos en la palanca del cambio. Por ejemplo:
“Voy a alcanzar mis objetivos y llegar a los incentivos del año 2016” Te recomiendo estas herramientas para sacar el potencial que llevas dentro: SER- HACER-TENER
3. Gestiona tu miedo. Muy bien, pero, qué quiere decir eso. Pues bien, el miedo es una de las emociones básicas, tiene un valor de protección, pero, en algunas ocasiones, como he comentado, nos bloquea. Si seguimos los pasos anteriores podemos mejorar personalmente.
Identificar cuando aparece esta emoción es básico para “tratar con ella”, saber de qué nos quiere proteger y “entenderla”. Es un ejercicio de diálogo interior en el cual ayudamos a nuestra emoción a una mejor gestión para conseguir superarnos y que no nos paralice.
Como decía Woody Allen: “El miedo es mi compañero más fiel, jamás me ha engañado para irse con otro”.
El resultado de este trabajo puede suponer mejores resultados, evidentemente, no son los únicos dado que la venta y la gestión comercial suponen un proceso cada día más complejo en el que intervienen multitud de factores, sin embargo, hay algunos elementos en los que podemos actuar nosotros mismos para producir algunos cambios en los demás e influir de manera positiva.
